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Gastreoenterología

La gastroenterología sirve para estudiar, diagnosticar y tratar todas las enfermedades que tienen relación con el aparato digestivo y todos los órganos que tengan relación con él. Por lo anterior, el gastroenterólogo puede tratar problemas que puedan presentarse en:

Hígado.
Páncreas.
Intestino delgado.
Intestino grueso.
Vías biliares.
Estómago.
Esófago.
Colon.
Recto.

¿Qué problemas trata el gastroenterólogo?

Al tratar las afecciones relacionadas con el aparato digestivo y los órganos relacionados, los gastroenterólogos son capaces de diagnosticar y tratar:

Gastritis.
Síndrome de Intestino Irritable.
Espasmos del esófago.
Cáncer de esófago.
Cáncer de páncreas.
Cáncer de estómago.
Úlceras pépticas.
Divertículos y diverticulitis.
Síndrome de Barret.
Reflujo.
Cirrosis.
Hepatitis.
Pancreatitis.
Pólipos del colon.
Litiasis biliar.
Enfermedad de Crohn.
Hernia hiatal.
Diarrea crónica y aguda.

¿Cuándo se debe ir al gastroenterólogo?

Cuando se presenten síntomas que tengan en primera instancia conexión con el aparato digestivo se debe acudir de inmediato con el médico gastroenterólogo. Algunos de estos síntomas son:

Inflamación del abdomen.
Dolor abdominal.
Dolor o dificultad para evacuar.
Gases en exceso.
Dificultad para deglutir.
Reflujo y agruras.
Diarrea que no cesa o que causa mareos o baja presión.
Sangre en las heces, que pueden manifestarse con heces de color obscuro.

¿Cómo se hace un examen de gastroenterología?

Existen diferentes exámenes que puede utilizar en gastroenterólogo para revisar y diagnosticar alguna posible enfermedad:

Colonoscopía

Con ayuda de un colonoscopio, el cual es un delgado tubo que tiene en la punta una luz y una cámara, se pueden observar el recto y el colon en busca de anomalías como pólipos, sangrado interno, cáncer de colon o inflamaciones. Durante la prueba es posible realizar biopsias para poder examinar el tejido sospechoso.

Endoscopía

Consiste en introducir un tubo delgado y flexible llamado endoscopio a través de la garganta. Esto con la finalidad de revisar el estado de salud del esófago, estómago y la primera parte del intestino delgado, llamado duodeno.

Con la endoscopía se pueden revisar las causas de sangrados, náuseas, dolor de abdomen, dificultad para tragar. Se pueden realizar procedimientos terapéuticos como detener sangrados, resecar tumores o liberar las vías biliares.

Laparoscopía

Consiste la introducción de un tubo delgado con una cámara en la punta llamado laparoscopio en el abdomen por medio de una pequeña incisión.

Se hace este examen para poder determinar posibles masas anómalas en el abdomen, tumores, obstrucciones, infecciones, tumores o embarazos ectópicos.

Gastroenterólogo pediatra

El gastroenterólogo pediatra es un médico pedíatra que cursó una subespecialidad en gastroenterología y nutrición.

Por ello, es capaz de atender a niños desde 0 meses hasta los 18 años que sufren de afección en el hígado, páncreas o aparato digestivo.

Es importante saber que las enfermedades que afectan a los niños en el rubro gastrointestinal son muy diferentes a las de un adulto, ya que los alimentos lo afectan de otra manera a su cuerpo que empieza a desarrollarse.

Se puede llevar al menor con el gastropediatra en casos de vómitos, náuseas, desnutrición, reflujo, estreñimiento, diarrea, intestino corto, enfermedad celiaca, fibrosis quística, incontinencia fecal, cólico de lactante, etcétera.

Etimología de gastroenterología

Gastroenterología es una palabra de origen griego que significa “estudio del estómago y el intestino”. Las palabras griegas que la componen son gaster, enteron, y el sufijo logía (logos).

Según la Real Academia Española (RAE) se define como “Rama de la medicina que se ocupa del aparato digestivo, especialmente del estómago y de los intestinos, y de sus enfermedades.”